Club Pirámide: corrida Mapocho río arriba

La fundación Astoreca encargada de hacer de parte de sus colegios particulares subvencionados, establecimientos de formación gratuita para la comunidad, en asociación con Olimpo producciones, Aguas Andina, RunChile y las municipalidades de Santiago, Las Condes y Vitacura, llevaron a cabo la primera corrida Mapocho río arriba, prueba en modalidad de cross country donde los participantes debían cubrir un trayecto por el lecho del río en pendiente negativa de 10K desde la partida en el sector del puente Pío Nono en la comuna de Santiago, hasta el punto de llegada en el sector de la rotonda Lo Curro en Vitacura.
El comienzo de la prueba se llevó a efecto tal como se tenía previsto a las 9:30 horas en punto con la asistencia de las autoridades de la región, la alcaldesa Carolina Tohá y el Intendente de Santiago Claudio Orrego quien también hizo el trazado junto a otros 1.180 participantes quienes al toque de partida se encontraron con un tipo de suelo muy irregular ya que este sector se encuentra cerrado con adoquines y una capa dura que trata de disminuir la disparidad pero que al ser de un color amarillo tierra no deja visualizar a simplicidad las irregularidades del camino lo que trajo las primeras torceduras de los participantes; ya en el kilómetro 1.3 y 2 de la ruta, se debía cruzar el cauce del río que a pesar de que "el niño" no se ha hecho presente con lluvias, para subir el caudal hizo más que uno (inclúyome) se llevara una mala sorpresa probando lo frío de las aguas mañaneras en la ropa. Desde ahí, hasta el kilómetro 6 el mismo terreno incluso ya menos dispar que terminaría en el sector de la torre Titanium en Las Condes en el que el río ya no está encausado y aparecen los ramales, árboles y piedras de río (bolones redondos de diferentes tamaños) que causaron estragos en los menos expertos y peor aún para los inocentes que con zapatillas de calle pensaron en terminar el recorrido; aquí (km 6) se puso bueno el tramo donde las diferencias entre los corredores de cerro en comparación con los de calle se hicieron insalvables y donde el ritmo fue lo que hizo diferencias notables y donde varias trampas en la final como acequias lodosas con diferentes profundidades hicieron deleite de muchos.
La llegada a la meta nos trajo la sorpresa de ver llegar en un décimo lugar en la general con 49:32 minutos a nuestro compañero Mauricio Urra y que a la final se llevaría un honroso segundo lugar en la categoría 40-44 años; pero eso no sería todo, ya que dentro de las damas que se atrevieron, en el lugar 16 apareció nuestra Beatriz Valencia quien llegó a un notable primer lugar en la categoría de damas 45-49 años con un crono de 1:09:12. Hacemos notar que de todos los competidores que largamos, sólo 481 llegaron a cruzar la meta lo que recuerda que la competencia no fué tan fácil como se veía en el papel.
En resumen, buen recorrido, más duro de lo que se creía sobre todo para los corredores acostumbrados a la calle, los horarios tanto de premiación como de partida a la hora y ordenado; el único "pero" se lo lleva la organización solo en el tema de la guardarropía en donde las bolsas facilitadas a los corredores para guardar sus pertenencias y que se llevaban en una van de la producción a la meta, no hubo como organizarlas lo que produjo demoras y mucha confusión para todos; lo demás excelente, buen abituallamiento en meta y una buena carrera que ofrece un cambio de las siempre competencias de calle sin necesidad de viajar más kilómetros hacia algún sector rural o montañoso.
Mauricio Urra

fotografías Beatriz Valencia, Mauricio Urra, RunChile.

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